Por Redacción
El Secretario General del Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje Marítimo, Mariano Moreno, rechazó la reforma laboral impulsada por el Gobierno de Milei y afirmó que “vuelve a tener como único objetivo quitar derechos a los trabajadores”. El dirigente sindical, señaló que la actual gestión libertaria «carece de una verdadera visión de desarrollo y producción».
“Si insisten con la misma receta, es porque esperan el mismo resultado”, aseguró Moreno. En los últimos días, distintos voceros de la administración reaccionaria confirmaron que el gobierno impulsará un nuevo proyecto de Ley de Reforma Laboral. Esta iniciativa obedece al mandato del Fondo Monetario Internacional a la convicción ideológica del Ejecutivo que concibe a la clase trabajadora como principal variable de ajuste en favor de los intereses del capital.
En este marco, Moreno aseguró que «el Gobierno continúa sin un plan de desarrollo ni una estrategia productiva. Para ellos, lo único que frena el crecimiento son los trabajadores y sus salarios. Mientras tanto, los trabajadores vemos cómo se abandona la producción y el trabajo calificado para apostar a la timba financiera».
Al mismo tiempo, consideró que «esta reforma busca imponer un modelo de trabajadores golondrina, como los de aplicaciones Uber, Rappi o Pedidos Ya: sin representación sindical, sin Convenio Colectivo de Trabajo y sin leyes claras que los protejan. Ese esquema lo quieren aplicar a todas las actividades».
Asimismo, indicó que la reformar laboral del oficialismo «promueve negociaciones individuales y refuerza el poder empresarial a través del miedo al despido y la competencia a la baja», lo que «sacrifica la mano de obra calificada, la seguridad, la capacitación y, sobre todo, la dignidad del trabajador».
Moreno se preguntó: «¿Qué puede hacer un trabajador si considera que gana poco, si su tarea es insegura o insalubre?» y aseveró que «esta reforma se complementa con la flexibilización para despedir, y la historia demuestra que el abuso empresario siempre se impuso sobre la razón».
El dirigente sindical explicó que en el ámbito marítimo «ya se está implementando una reforma laboral encubierta» mediante la entrega de certificados de excepción que autorizan el ingreso de barcos y tripulaciones. Sostuvo que que esas embarcaciones no tributan en el país, operan con regímenes laborales más precarios y pagan salarios muy inferiores, lo que constituye una competencia desleal que afecta a la soberanía y elimina empleo argentino.
Moreno precisó que esta práctica surge a partir de la Resolución 41/25 de la Agencia Nacional de Puertos y Navegación (ANPyN), la cual “reproduce por vía administrativa lo que el Congreso ya rechazó por inconstitucional e ilegal con el DNU 340”. Dicha norma habilitó la apertura del cabotaje a buques de bandera extranjera mediante certificaciones de exención, cuya fiscalización —según el propio organismo— no está garantizada.
En tal sentido, el representante de los trabajadores precisó: «es una violación sistemática de la ley que la ANPyN permite. En lugar de cuidar los intereses nacionales, funciona como una agencia marítima al servicio de compañías extranjeras». Por último, añadió que «lo vivimos con el impuesto a las ganancias, con la desregulación de la Marina Mercante, y ahora nos toca decidir sobre nuestros derechos laborales».
