Por Redacción
Majed Bamya, embajador alterno de Palestina ante la ONU aseguró que “la matanza de civiles palestinos no es un efecto colateral de la guerra”. Al dirigirse, en la últimas horas, al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, puntualizó: “Este ataque israelí se enfoca, intencionalmente, en la matanza masiva e indiscriminada de civiles”.
“La catástrofe humanitaria no es consecuencia de la guerra, es una herramienta empleada por Israel para presionar a la gente y expulsarla”, explicó el funcionario palestino. Al mismo tiempo agregó que “todo esto requiere un alto el fuego inmediato que este Consejo no llegado a pedir”.
Bamya, inquirió: “¿Por qué se salen con la suya en asesinatos a esta escala sin precedentes? Porque nunca se les ha responsabilizado. Por eso confiesan sus crímenes, por eso nos roban la vida, nuestra tierra, nuestros recursos, nuestro dinero, nuestro pasado, nuestro presente y nuestro futuro a plena luz del día”.
La situación en Gaza se extrema día a día. Según datos de la ONU el 40 % de la población se encuentra al borde la una grave hambruna. Más de 1.9 millones de personas han sido víctimas de desplazamientos forzados y sufren el destierro de sus hogares. Muchos tienen que buscar refugios en las calles bajo condiciones inhumanas.
En este escenario más de 21.000 personas han sido asesinadas. En la actualidad existen más de 54.036 heridos. El conflicto se extendió a Cisjordania donde se han registrado 311 asesinados, y más de 3.803 heridos. Por otro lado, 8.500 niños han muerto producto de los sistemáticos ataques israelíes. Asimismo, 6.200 mujeres y 695 ancianos fueron asesinados hasta el momento.
James Elder, portavoz de UNICEF, declaró “en mis 20 años con UNICEF, viajando de una crisis humanitaria a otra -desde hambrunas a inundaciones, desde zonas de guerra a campos de refugiados- simplemente nunca había visto tanta devastación y desesperación como la que está ocurriendo en Gaza”.
El funcionario denunció que “la intensidad de los ataques, el número masivo de víctimas infantiles, la desesperación y el pánico de la gente que se desplaza, gente que ya no tiene nada, es palpable. Es un desastre humanitario sobre otro”.
En esa línea narró:“Nunca Olvidaré como un hombre de unos 60 años salió de entre las ruinas de un edificio de apartamentos recientemente bombardeado. Al principio, pensé que estaba indicando el número 10, como si hubieran muerto 10 personas. Pero se corrigió, usando un palo para escribir en la tierra: 30. No era el número de muertos. Era el número de miembros de su familia fallecidos en la explosión. el asesinato y la mutilación de niños, el secuestro de niños, los ataques contra hospitales y escuelas y la denegación de acceso humanitario son una mancha en nuestra conciencia colectiva”.
29/12/2023
