*Por Redacción
La perpetua intervención judicial del SOMU acordó, por segundo año consecutivo, un aumento salarial del 21 % en dos tramos con cláusula gatillo. Sin negociación salarial y de manera unilateral el incremento salarial se cierra al gusto del gobierno interventor de sindicatos.
De esta manera se estableció un aumento en dos cuotas. La primera del 11% será retroactiva al 1° de Mayo y la segunda del 10% se percibirá en octubre. Por otro lado el se estipuló el pago de una “gratificación especial”, por única vez, del 11% sobre el salario bruto vigente a marzo del 2017.
Recién en marzo del 2018 las partes se volverán a reunir para analizar el devenir inflacionario y acordar un ajuste salarial si los índices de inflación superan el aumento otorgado. Un negocio redondo para un Gobierno que apunta constantemente contra los acuerdos sindicales y que impulsa la flexibilización laboral por distintas vías.