Por Redacción
La Federación Portuaria, Marítima y de la Industria Naval de la República Argentina, celebró este miércoles en su sede central el Congreso Nacional para la elección de autoridades nacionales. Con lista única, Juan Carlos Schmid, ratificó su conducción por unanimidad. De esta manera, el dirigente marítimo estará el frente de la FEMPINRA por cuatro años más.
Schmid será secundado, en los cargos principales por Raúl Huerta, titular de la Asociación Argentina de Empleados de la Marina Mercante como Secretario Adjunto de la Federación; Héctor Rojas, conductor del SUPA Bajo Paraná, ocupara la Secretaría Gremial, en tanto que Roberto Coria, Secretario General del Sindicato de Guincheros – quien se recupera del atentado que sufrió la semana pasada- estará al frente de la Secretaría de Finanzas.
Tras el acto electoral, el Secretario General del Sindicato del Personal de Dragado y Balizamiento, dio lectura al Documento producido por la FeMPINRA en el marco del Congreso. Ante un gran número de militantes sindicales, de las distintas organizaciones sindicales que conforman la federación, expresó que “la unidad es el camino y la violencia nuestro límite”, en alusión a los hechos de violencia que casi le cuestan la vida a Coria.
Al mismo tiempo, Schmid, señaló que “sin dudas vivimos tiempos complejos, de enorme tensión, tiempo de reacciones cada vez más peligrosas, pero ello no debe ser excusa ni justificar cualquier método para dirimir diferencias entre nuestras filas”.
“No podemos substraernos de la realidad que nos interpela cotidianamente. El atentado sufrido por nuestro compañero, Roberto Coria, la última semana, pone de relieve el punto de inflexión del cual debe dar cuenta la sociedad en general. No hay manera, ni razón, para naturalizar la violencia y mucho menos para asumir el paradigma imperante que menosprecia la vida”, enfatizó el Secretario Adjunto de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte.
Asimismo, agregó: “Sabemos que existen actores sociales que pretenden retrotraernos a lo más lúgubre y dramático de nuestra historia. Estos personajes están enquistados en todos los ámbitos de la vida social nacional y operan permanentemente dentro del espectro donde la violencia es el ordenador de la vida política”.
En esa línea, Schmid, remarcó que “la evidencia histórica y nuestra propia experiencia, de la cual nos nutrimos, nos cuenta que cuando los extremos se adueñaron de la vida política del país vivimos una tragedia nacional y el saldo fue de sangre para nuestro pueblo. Nuestras únicas armas siempre han sido la palabra, la movilización y la lucha pacífica por nuestros derechos”.
El re-electo Secretario General de la FeMPINRA subrayó que “vale recordar al Padre Mujica cuando en los ’70 les decía a los jóvenes: “Lo importante no es discutir si existe el cielo o no, lo importante es terminar con este infierno”. En ese mandato están asentados los principios sociales que son también morales”.
Por otro lado, sostuvo que “la palabra sindicalismo encuentra su origen en la definición que describe uno de esos principios básicos: “Haciendo Justicia Juntos”, por eso bajo ningún aspecto esa justicia puede ser reivindicada bajo el imperio del plomo, del “apriete” o de la “patota”. Cualquier acto de violencia es un acto de injusticia”.
““La soberbia de la ignorancia no tiene límites”, señaló Juan Domingo Perón. Nuestro deber ético es combatir, precisamente, esa ignorancia de la violencia como recurso político y fanatismo ideológico. Sobre todo en estos días, donde emergen personajes políticos, resaltados por los medios concentrados, que bajo la falsa representación de la libertad imponen un discurso velado de violencia”, afirmó Schmid.
De tal manera aseguró que “el sindicalismo argentino no responde a la subordinación de estamentos violentos, ni la coacción. Somos plenamente conscientes que nuestros ideales no se negocian y que nuestros sueños no se entregan, porque nuestros principios de vida se rigen por la concreción de un país más justo, más libre y soberano”.
El sindicalistas, destacó que “la unidad es necesaria e imprescindible si queremos mantener firmes nuestras banderas, pero ella debe encontrar límites y la violencia es uno de esos límites. No hay unidad posible con quien no respeta la vida, ni con quienes fomentan, incluso desde sectores ajenos a nuestro ámbito, la división en las organizaciones sindicales”.
En esos términos, Schmid concluyó que “la unidad es el camino…la violencia, nuestro límite. Perón nos decía que “aquel que lucha dentro del Movimiento para defender su interés personal es un traidor a nuestra causa”. Nuestro movimiento quiere hombres honrados, sinceros, capaces de trabajar por el bien común y no por su interés personal. La FeMPINRA siempre será fiel custodio de este legado”.
1/12/2021
