Por Redacción
En una decisión que amplifica el posicionamiento judicial respecto a su independencia, la Cámara Federal de Casación Penal ratificó este miércoles la condena contra la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner en la causa conocida como Vialidad. El tribunal, integrado por los jueces Mariano Borinsky, Gustavo Hornos y Diego Barroetaveña, confirmó la condena a seis años de prisión y le impuso una inhabilitación de por vida para ocupar cargos públicos.
La defensa de la actual titular del Partido Justicialista, informó que apelará el fallo en la Corte Suprema. En tal sentido, los letrados defensores precisaron que el proceso estuvo “viciado y sin pruebas”. Mientras no haya una resolución de la Corte, la expresidenta no podrá ser detenida ni su inhabilitación quedará firme.
Durante la lectura del fallo, Hornos declaró que se la condenaba a “la pena de seis años de prisión e inhabilitación especial perpetua para ejercer cargos públicos”, en su rol de “autora penalmente responsable del delito de administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública”. En respuesta, la expresidenta, que se encontraba en la localidad de Moreno en un acto junto a la intendenta Mariel Fernández y unas 400 mujeres, evitó hacer declaraciones inmediatas.
En paralelo, en las afueras del edificio judicial de Comodoro Py, se organizó una clase pública titulada “CFK, el poder real y la mafia judicial. Un caso de estudio de lawfare”. Esta actividad fue impulsada por el dirigente social y excandidato presidencial Juan Grabois, quien, frente a una multitud, expresó su rechazo al fallo: “Estamos frente a una mafia, un mecanismo extorsivo de disciplinamiento que, principalmente, busca plata. Hay una intencionalidad política, porque si no, estarían presos otros funcionarios”.
Grabois destacó que la causa no incluyó ninguna prueba directa de corrupción, lo que, según él, exponen una degradación del Estado de Derecho en el país. La propia Fernández de Kirchner había publicado una carta el martes donde se anticipaba la decisión de Casación. En esa misiva, recordó los vínculos que unen a los jueces del tribunal con el expresidente Mauricio Macri: Borinsky, afirmó, solía jugar al tenis con Macri en la residencia presidencial de Olivos, mientras que Hornos visitaba al exmandatario en la Casa Rosada, y actualmente enfrenta denuncias por acoso sexual y violación. Barroetaveña, en tanto, fue señalada por la expresidenta como exintegrante de una lista de magistrados afines al macrismo en el Consejo de la Magistratura.
Este fallo se suma a una serie de operaciones políticas que atañen al sistema judicial liberal y que ponen en la mira al Poder Judicial por su falta de imparcialidad y por presuntas connivencias políticas en casos de alto perfil. Mientras la Corte Suprema no emite un veredicto, la expresidenta mantendrá su libertad y su defensa seguirá denunciando lo que considera una estrategia de “persecución judicial” impulsada por intereses políticos y mediáticos en Argentina.
13/11/2024
