Por Redacción
En una sesión de emergencia del Consejo de Seguridad, la ONU instó a Israel e Irán a actuar en pro de la paz y la estabilidad en Medio Oriente tras los recientes ataques israelíes. El secretario general adjunto de la organización para Medio Oriente, Mohamed Khaled Khiari, advirtió que “el último intercambio de ataques entre Israel e Irán supone el riesgo de sumir a la región en terreno desconocido en un momento en el que necesitamos urgentemente una desescalada en todos los frentes”.
La reunión fue solicitada por Argelia, China y Rusia en respuesta a una carta del gobierno iraní que denunciaba los bombardeos israelíes. Las fuerzas israelíes atacaron, según reportes, dos bases militares secretas en el sureste de Teherán, vinculadas a un antiguo programa balístico de Irán. Imágenes satelitales señalaron daños en la base de Parchin, donde el país persa habría realizado pruebas de explosivos de alto poder que podrían utilizarse en un arma nuclear.
El titular de la ONU, António Guterres, expresó su alarma por la escalada en la región y condenó todos los actos que exacerban la tensión. “Es imperativo que todas las partes detengan las acciones militares en la región para evitar una conflagración regional y volver a la vía diplomática”, instó. Por otro lado, En el norte de Gaza, la situación humanitaria es crítica. Khaled Khiari describió las condiciones como “desgarradoras”, con civiles atrapados bajo escombros y careciendo de atención médica vital.
El embajador permanente de Rusia ante la ONU, Vassily Nebenzia, destacó que “no hay alternativa a un alto el fuego” y advirtió que la región se encuentra al borde de una guerra regional que sería catastrófica para todos, incluyendo a Israel. “La violencia regional se ha convertido en una espiral descontrolada”, aseguró el funcionario ruso pidió a la comunidad internacional trabajar para prevenir una mayor escalada.
El embajador de China, Fu Cong, condenó las acciones israelíes y expresó que “la situación en Medio Oriente está al límite”. Exhortó a Israel a cesar cualquier provocación y a todos los actores a buscar una resolución diplomática. “En este momento crítico, todas las partes deberían atender al llamado de la comunidad internacional a instaurar un alto el fuego y poner fin a los combates”, añadió.
Desde la perspectiva iraní, el embajador Amir Saeid Iravani subrayó que el bombardeo no es un incidente aislado, sino parte de un patrón de impunidad alimentado por el “apoyo incondicional de Estados Unidos”. Denunció la “violación grave y atroz” del derecho internacional y de la Carta de la ONU por parte de Israel y acusó a la comunidad internacional de permanecer en silencio ante tales atrocidades.
El panorama actual exige medidas decisivas por parte del Consejo de Seguridad. “La responsabilidad requiere más que palabras y recomendaciones”, enfatizó Iravani, quien recordó que Irán se reserva el derecho de responder a cualquier agresión. La comunidad internacional enfrenta un reto crucial para restablecer la paz y la autoridad en una región cada vez más tensa.