Por Redacción
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) informó que la inflación de septiembre llegó al 2,1%, lo que marcó una leve aceleración respecto de los meses previos y superó el piso del 2% después de cuatro meses de estabilidad. La variación interanual del Índice de Precios al Consumidor (IPC) se ubicó en 31,8%, el valor más bajo desde julio de 2018.
El dato generó preocupación en la administración de Javier Milei, que viene de sufrir una derrota electoral en la provincia de Buenos Aires y enfrenta la presión del tipo de cambio. Con este resultado, la inflación acumulada en lo que va del año alcanzó el 22%.
De acuerdo con el informe del organismo, los rubros que más aumentaron fueron Vivienda, agua, electricidad y otros combustibles, con una suba de 3,1%, y Educación, que registró el mismo incremento. El área de Transporte avanzó 3%, mientras que Salud aumentó 2,3%, impulsada por los ajustes en prepagas y medicamentos.
En el caso de los alimentos, el INDEC señaló que “la división con mayor incidencia en la variación mensual regional fue Alimentos y bebidas no alcohólicas, excepto en Patagonia, cuya mayor incidencia se registró en Transporte”. Los mayores aumentos dentro del Gran Buenos Aires se concentraron en la harina de trigo (5,2%), aceite de girasol (3,7%), galletitas de agua (4,1%) y pan de mesa (2,8%).
El Centro de Economía Política Argentina (CEPA) había estimado un alza del 2,3%, por lo que el dato oficial se ubicó por debajo de las proyecciones privadas. La inflación núcleo, que excluye precios regulados y estacionales, fue del 1,9%, una décima menos que en agosto.
El informe del CEPA detalló que las naftas tuvieron una suba promedio del 4,9%, mientras que el gasoil trepó 6,4%, lo que incidió en el comportamiento general de los precios. El tipo de cambio mayorista avanzó 5,3%, aunque su impacto sobre la inflación se moderó por la caída del consumo y el congelamiento parcial de tarifas y salarios.
Por su parte, los rubros Recreación y cultura (1,3%) y Restaurantes y hoteles (1,1%) mostraron aumentos inferiores al promedio general. En contraste, el sector de Equipamiento y mantenimiento del hogar subió 2,2%, mientras que Comunicación avanzó 2,2% debido a nuevos ajustes en telefonía, internet y cable. Los productos que más aumentaron fueron el tomate redondo (30,9%), el limón (16,6%) y la banana (5,7%), seguidos por la harina, el pan y los artículos de limpieza.
Los analistas señalaron que el dato de septiembre refleja el impacto del salto del dólar y el freno en la recuperación del salario. Las políticas del gobierno libertario de mantener ancladas las tarifas y limitar las paritarias contribuyeron a contener la inflación, aunque a costa de una fuerte retracción del consumo.
Las expectativas para octubre se concentran en el resultado electoral del 26, en medio de la incertidumbre sobre la continuidad del esquema cambiario y los compromisos asumidos con el Fondo Monetario Internacional y al dependencia financiera con Estados Unidos. La estabilidad de los precios, según los economistas, dependerá del nivel de reservas, el comportamiento del dólar y las definiciones políticas del oficialismo tras las elecciones.