Por Redacción
Un informe elaborado en forma conjunta por UNICEF y Naciones Unidas, indicó que África Occidental y Central es la región del mundo con mayor número de niños reclutados por las milicias no estatales y por las Fuerzas Armadas. Por otro lado, allí es donde se han registrado el mayor índice de niños “reconocidos como víctima de violencia sexual”.
Los datos verificados por las Naciones Unidas, han registrado que desde 2016 más de 21.000 niños han sido reclutados en la región por grupos armados y fuerzas paramilitares. En ese período más de 2.200 chicos han sido victimas de violencia sexual. Más de 3.500 niños fueron secuestrados y se han verificado más de 1.500 a escuelas y hospitales.
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, adoptó en 2005 la Resolución 162 para “establecer un mecanismo de las Naciones Unidas para monitorear e informar las siguientes seis violaciones graves contra niños durante un conflicto armado: 1) asesinato y mutilación de niños, 2) reclutamiento y uso de niños, 3) secuestro de niños, 4) violación y otras formas de violencia sexual contra niños, 5) ataques a escuelas y hospitales, y 6) negación del acceso humanitario.
Según los datos dados a conocer por la ONU “desde 2005, una de cada cuatro violaciones graves verificadas por las Naciones Unidas en todo el mundo se ha cometido en África occidental y central. Solo en el último año, más de 6.400 niños (32 % de ellos niñas) fueron víctimas de una o más violaciones graves en la región”.
Marie-Pierre Poirier, Directora Regional de UNICEF para África Occidental y Central, expresó que “ya sea que los niños de África Occidental y Central sean objetivos directos o víctimas colaterales, están atrapados en zonas de conflicto, enfrentados a la violencia y la inseguridad”.
La funcionaria, agregó que “las violaciones graves de sus derechos perpetradas por las partes en un conflicto son inaceptables. Tienen un impacto negativo en su capacidad para aprender, trabajar, construir relaciones personales y contribuir al desarrollo de sus comunidades y países”.
Pierre Poirier indicó que “UNICEF insta a todas las partes en los conflictos de la región a prevenir y poner fin a las violaciones graves contra los niños y garantizar que todos los perpetradores rindan cuentas”.
La situación en países como Camerún, República Centroafrinca y la Repúblcia Democrática del Congo, así como la crisis en Sahel Central y la cuenca del lago Chad, tiene un impacto arrollador y devastador para los niños y sus comunidades.
Según UNICFE, “con el recrudecimiento del conflicto armado y la pandemia de COVID-19, 57,5 millones de niños en África occidental y central necesitan asistencia humanitaria, una cifra que casi se ha duplicado desde 2020″.
En este dramático contexto, la organización ha colaborado con distintos gobierno de la región para “fortalecer los mecanismos de seguimiento y denuncia de violaciones graves, apoyar la liberación y reintegración de los niños liberados de las fuerzas y grupos armados, reunir a los niños separados con sus familias, brindar atención médica y psicosocial a los niños afectados por el conflicto y brindar atención a las sobrevivientes de violencia sexual y de género”.
En tal sentido, Pierre Peral, remarcó que “la salud mental y el apoyo psicosocial para niños y adolescentes son esenciales y están en el centro de la respuesta humanitaria de UNICEF. Cuando reciben la atención y el apoyo psicosocial necesarios, el acceso a la educación y los medios de subsistencia, los niños son capaces de superar lo que han pasado y reconstruir sus vidas”.
“Desde 2015, más de 4,3 millones de niños se han beneficiado de apoyo psicosocial y de salud mental. Además, también durante el mismo período, más de 52 000 niños asociados con fuerzas y grupos armados han recibido apoyo para su reintegración en su comunidad”, precisó el informe de la ONU-UNICEF.
Por último, en ese período “se ayudó a casi 65 000 niños a encontrar y reunirse con sus familias; y cerca de 183 000 mujeres, niñas y niños se han beneficiado de intervenciones para prevenir y responder a la violencia de género, incluidos servicios de gestión de casos, asistencia jurídica, atención médica, protección, educación y habilidades para la vida”.
24/11/2021