El Sindicato Trabajadores Viales y Afines de la República Argentina, que conduce Graciela Aleñá, llevó a cabo este lunes un abrazo simbólico en 24 sedes, campamentos y balanzas de todo el país en defensa de Vialidad Nacional ante el avance de las políticas oficiales que tienen como objetivo desfinanciar al organismo y frente a la posibilidad de pérdidas de puestos de trabajo.
La medida tuvo como objetivo visibilizar el desfinanciamiento que afecta al organismo y el riesgo que ello implica para los puestos de trabajo de millas de empleados viales, en un contexto donde las políticas del Gobierno Nacional son percibidas como una amenaza directa contra la estabilidad laboral en el sector.
“Nos unimos para proteger nuestros puestos de trabajo, esenciales para el desarrollo y la conectividad del país”, destacó la conducción sindical, en el marco de un plan de lucha que lleva varios meses, con denuncias de una gestión que, según afirmó, busca desmantelar Vialidad Nacional. En los últimos días el sindicato intensificó sus acciones con movilizaciones permanentes y asambleas en distintos puntos del territorio nacional.
Aleñá, quien se hizo presente en la sede de General Villegas, donde también participaron trabajadores de Ameghino, recalcó la importancia de esta medida: “No solo representa un gesto de unidad, sino también una declaración clara contra las políticas que amenazan nuestro rol fundamental en la infraestructura y comunicación nacional”.
Las palabras reflejan el profundo descontento de los trabajadores ante lo que consideran intentos de desarticulación del organismo por parte del Gobierno, con el riesgo de privatizar tramos de las rutas nacionales. En este contexto, la titular del STVyARA sostuvo: “Vialidad Nacional y los trabajadores tenemos un rol esencial y estratégico para el desarrollo en la conectividad de nuestro país. Vamos a defenderla siempre, por encima de cualquier interés político o económico”.