*Por Redacción
El malestar social, producto de la crisis económica inducida por la gestión Cambiemos, crece desde el pie. A las derrotas políticas de las últimas semanas el gobierno tiene que sumarle las masivas manifestaciones populares contra el modelo. El proceso de profundización del ajuste, producto del acuerdo con el FMI, aceleró la organización de la resistencia social en diversos ámbitos del quehacer político y sindical.
“La calle está cada vez más dura. Lo que veníamos hablando en estos últimos tiempos, la gente cada vez se está expresando más. Hoy nuevamente el repudio en una Marcha Federal. Hay que unificar todos esos criterios y si es necesario un paro general, habría que salir a concretarlo”, señaló a AGN Prensa Sindical, Sergio Sánchez, Secretario General del SUTPA.
Las palabras elocuentes del dirigente sindical desmienten al escepticismo ideológico de aquellos que afirman, más desde el sentido común que desde la apreciación objetiva, que el pueblo tardó en reaccionar. “Estamos todos en la calle pidiendo, reclamando, y el gobierno no escucha nada. No va a quedar otra que terminar en un gran paro general”.
Sánchez se permitió reflexionar sobre el rol del campo político en éste proceso de ofensiva de resistencia social asumida por los trabajares. En ese sentido destacó que “la base va a ser el Movimiento Obrero para que la política se vuelva a juntar. Por eso creo que, hoy más que nunca, los trabajadores en la calle tienen que armar la unificación del peronismo. En la base de toda columna vertebral de un Moviento está el Movimiento Obrero y ahora volvió a ser lo mismo”.
El Movimiento Obrero organizado ha dado muestra de madurez política a la hora de sostener la organización en la lucha, junto a la unidad. Eso a pesar de las diferencias existentes entre distintos sectores. No hay consignas vacías en el reclamo de los trabajadores. Hay conciencia y memoria.