Por Redacción
La Conferencia de la ONU sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) alertó este lunes sobre la crisis de deuda que afecta a muchos países en desarrollo, destacando que casi el 70% de estas naciones han enfrentado problemas con la sostenibilidad de su deuda externa en los últimos seis años. Según la secretaria general de la UNCTAD, Rebeca Grynspan, “las deudas deberían impulsar el desarrollo de los países; sin embargo, están presionando a sus economías, en muchos casos, obligándolos a descuidar o abandonar sus programas de desarrollo”.
La funcionaria señaló que la buena gestión de la deuda se basa en una administración prudente de los recursos, “que no nos pertenecen por completo”, y subrayó la necesidad de garantizar que los préstamos se utilicen para proyectos que generen valor y puedan autofinanciarse en el futuro. Del mismo modo, destacó que la transparencia, la lucha contra la corrupción y la correcta asignación de prioridades son aspectos fundamentales para evitar un deterioro aún mayor en la sostenibilidad de las deudas.
Según la UNCTAD, actualmente unos 3.300 millones de personas viven en países que gastan más en el servicio de la deuda que en salud o educación. Asimismo, los pagos de intereses superan las inversiones destinadas a la lucha contra el cambio climático en casi todos los países en desarrollo. “En los últimos seis años, más de dos tercios de los países en desarrollo han experimentado un deterioro en la sostenibilidad de su deuda externa”, informó Grynspan.
En cuanto a la deuda, la UNCTAD señaló que casi dos tercios de la deuda externa de los países en desarrollo están en manos de acreedores privados, lo que complica aún más la reestructuración de los créditos. Grynspan explicó que algunos tenedores de bonos privados se han convertido en “acreedores principales” y, en muchos casos, están dispuestos a litigar agresivamente.
El panorama se complica aún más al no existir mecanismos de moratoria de deuda, lo que obliga a muchos países a priorizar el pago de sus deudas por encima de sus obligaciones de desarrollo. La funcionaria puntualizó que “no hay moratorias de deuda, pero sí de desarrollo”, lo que coloca a los países en una situación difícil.
Grynspan instó al Fondo Monetario Internacional (FMI) a revisar la arquitectura financiera global ya tomar para reformar el sistema de medidas de gestión de la deuda, de manera que los países en desarrollo puedan acceder a recursos más accesibles y de largo plazo. Asimismo, enfatizó la necesidad de construir un sistema financiero que no esté centrado en la especulación, sino en el bienestar de las personas y en el desarrollo sostenible a largo plazo.
“Detrás de nosotros yace un sistema que necesita reformas; frente a nosotros, la oportunidad de construir un sistema que beneficie a las personas ya la estabilidad, no a la especulación al desarrollo a largo plazo, no a impagos recurrentes”, concluyó la titular de la UNCTAD.
En su intervención final, la secretaría general de la UNCTAD llamó a los países a llegar a la próxima Conferencia Internacional de Financiamiento al Desarrollo, que se celebrará en Sevilla, España, en junio de este año, con propuestas concretas y prácticas para enfrentar la crisis de deuda y fomentar el desarrollo sostenible.
18/3/2025
