Por Redacción
Luego de que el Tribunal Oral Federal N° 2 diera a conocer el fallo por el cual condenó a la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para el ejercicio de cargos públicos, en el marco de la causa por la obra pública en Santa Cruz, la exmandataria denunció “la existencia de un sistema paraestatal, de un sistema donde se decide sobre la vida, el patrimonio y la libertad del conjunto de los argentinos”.
Si bien los argumentos del condena recién se conocerán en marzo, el Tribunal condenó a la titular del Senado de la Nación por administración fraudulenta, en tanto la absolvió por el delito de asociación ilícita. En un mensaje dirigido a la opinión pública en general, Fernández de Kirchner, aseguró que “esta condena no es una condena por las leyes de la Constitución o por las leyes administrativas, por el código penal, esta es una condena que tiene su origen en un sistema que, yo casi ingenuamente diría, aquella vez el 2 de diciembre de 2019, hablé de lawfare”.
“Ahora, recientemente, también he rescatado el concepto de Partido Judicial. Tal vez por una suerte de deformación juvenil, muy lectora, muy de teorizar, muy de analizar y esto es mucho más simple, esto no es ni lawfare, ni Partido Judicial, esto es un estado paralelo y mafia, mafia judicial”, agregó.
Del mismo modo, remarcó: “Esto es el Poder Judicial de la República Argentina en articulación con los grandes medios, con las empresas. Y este es el sistema que hoy me condena a mí. Este es el sistema, que es un sistema en el cual no van a tolerar jamás que alguien, como me tocó desempeñar a mí la presidencia de la nación en dos oportunidades, no haga lo que ellos dicen”.
Por otro lado, en otro momento de su exposición que duró algo más de hora y media, la expresidenta subrayó que “es el poder en la Argentina. El poder económico y mediático que controla, en una suerte de Estado paralelo, y que coarta. Que coarta permanentemente. Entonces, además, es también un sistema disciplinador. Hay que disciplinar a la dirigencia política argentina”.
Al mismo tiempo, afirmó: “Me condenan porque condenan un modelo de desarrollo económico y de reconocimiento de los derechos del pueblo. Por eso, por eso me condenan. Pero la condena no son los seis años o la cárcel. La condena real que dan es la inhabilitación perpetua a ejercer cargos políticos electivos”.
En ese contexto, Cristina adelantó que va a “hacer lo mismo que hice el 10 de diciembre del 2015. Me acuerdo cuando Daniel Scioli me vino a proponer que fuera candidata a diputada nacional para darle fuerza a la lista, para acompañar… No, no, no. No voy a someter a la fuerza política que me dio el honor de ser dos veces Presidenta y una Vicepresidenta a que la maltraten en periodo electoral con una candidata condenada, con inhabilitación perpetua, con administración fraudulenta por el Estado”.
Asimismo añadió: ” ¿A mí administración fraudulenta por el Estado y a éstos, los amarillos, que nos dejaron 45.000 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional se pasean orondos en los aviones de Clarín? Bueno, no voy a ser candidata. Es más, una muy buena noticia para usted, Magnetto. ¿Sabe por qué? Porque el 10 de diciembre de 2023 no voy a tener fueros, no voy a ser Vicepresidenta. Así que le va a poder dar la orden a sus esbirros de la Casación y de la Corte Suprema que me metan presa. Sí, pero mascota de usted nunca, jamás. ¿Entiende? Nunca, jamás”.
En ese plano confirmó, “no voy a ser candidata a nada, ni a Presidenta, ni a Senadora… Mi nombre no va a estar en ninguna boleta. Termino el 10 de diciembre y me vuelvo como me volví el 10 de diciembre de 2015 a mi casa. A la misma casa, a la misma casa de donde salí un 25 de mayo de 2003 para acompañar a quien fuera mi compañero”.
En esa línea aclaró que “esto es para explicar qué sistema está funcionando en la Argentina. Y la verdad que terminar con la ingenuidad teorizante del lawfare y del partido judicial… No, no. Mafia y Estado paralelo. Eso es lo que está pasando en la Argentina y eso es lo que hoy me condenó a seis años de cárcel y a inhabilitación perpetua. Esta es la verdadera condena, esto es lo que querían, la inhabilitación perpetua. Me va a poder meter presa después del 10 de diciembre”.
“Eso sí, siempre y cuando, algún empresario, algunos Caputos de la vida, no se les ocurra financiar a algunas otras bandas de marginales, y antes del 10 de diciembre de 2023 me peguen un tiro. Que eso es lo que usted quiere: presa o muerta”, concluyó Cristina Fernández de Kirchner.
7/12/2022