Por Redacción
Justin Trudeau, primer ministro de Canadá, confirmó este lunes su renuncia al cargo luego de casi una década en el poder. En una declaración realizada en Ottawa, el mandatario afirmó que se mantendrá en funciones hasta que el Partido Liberal elija a un nuevo líder, proceso que será clave de cara a las elecciones generales previstas para octubre de este año.
“Renuncio como líder del partido y como primer ministro”, aseguró Trudeau durante la conferencia de prensa. Explicó que tomó la decisión tras evaluar las crecientes divisiones dentro de su formación política y la necesidad de ofrecer a los canadienses una opción renovada para las urnas. “Aunque soy un luchador, me doy cuenta de que no soy la mejor opción para liderar el partido en las próximas elecciones”, admitió.
Crisis política y desgaste del liderazgo
El anuncio de Trudeau llega en medio de una caída significativa de su popularidad, agravada por tensiones internas en el Partido Liberal. Encuestas recientes muestran un descenso en el apoyo a su gestión, afectada por el incremento del costo de vida, problemas de acceso a la vivienda y un estancamiento legislativo en el Parlamento.
En ese contexto, Trudeau anunció la suspensión de las actividades parlamentarias hasta el 24 de marzo, medida que justificó como un intento por superar los bloqueos legislativos que han impedido avanzar en políticas clave. “El Parlamento ha estado paralizado tras una de las sesiones más largas de un gobierno minoritario en la historia de Canadá. Necesitamos una nueva etapa”, explicó, subrayó que la gobernadora general, Mary Simon, respaldó la decisión.
Divisiones internas y salidas clave en el gabinete
La dimisión del primer ministro también se enmarcó en una crisis interna en el Partido Liberal, exacerbada por la renuncia de figuras clave como Chrystia Freeland, exministra de Finanzas, y John Frasier, exministro de Vivienda. Freeland, quien había ocupado un rol destacado como viceprimera ministra, expresó fuertes discrepancias con las recientes políticas económicas impulsadas por Trudeau.
“Canadá enfrenta retos graves, y eso requiere prudencia fiscal. No podemos asumir riesgos innecesarios en medio de las tensiones comerciales actuales”, manifestó Freeland al momento de su salida.
Freeland y Mark Carney, exgobernador del Banco de Inglaterra, se perfilan como los principales candidatos para liderar el Partido Liberal tras la salida de Trudeau. Este proceso será crucial para definir la estrategia del partido frente a Pierre Poilievre, líder del Partido Conservador, que actualmente domina las encuestas con una ventaja de 20 puntos.
Un legado marcado por contrastes
Trudeau asumió el cargo en 2015 con la promesa de devolver a Canadá sus valores progresistas tras una década de gobierno conservador. Aunque logró avances en derechos sociales y medioambientales, su mandato quedó opacado por el desgaste político y la incapacidad de resolver problemas estructurales como la inflación y la crisis de vivienda.
En su discurso, el primer ministro insistió en la importancia de preservar los principios que definieron su gestión. “Canadá debe guiarse por la diversidad, la inclusión y la fortaleza, valores que debemos defender frente a quienes promueven la división”, concluyó.
7/1/2025
