Opinión

Cada cosa a su debido tiempo

*Por Oscar Barbieri

En el 2003 Néstor Kirchner puso en vigencia nuevamente todos los convenios colectivos de trabajo y habilitó después de 13 años la Comisión del salario mínimo vital y móvil, apostó al club del trabajo y la producción en lugar del club de los devaluadores y en 3 años pasamos del 26% de desocupación al 6% (LA ÚNICA VERDAD ES LA REALIDAD).

Hoy, como un remake de una mala película de terror, algunos vuelven a impulsar el cambio del régimen indemnizatorio y flexibilización laboral para los “nuevos puestos de trabajo”. Carentes de ideas, apelan a una receta fallida aplicada en los 90 y que género 3 millones de desocupados.

El horizonte de todas las fuerzas políticas de nuestro país debería ser trabajar por el crecimiento económico con inclusión social, no solo solamente el número macro, sino que se refleje efectivamente en la recuperación real y plena de empleo genuino y en el poder adquisitivo del salario del trabajador y de los jubilados.

Para ello, primero debe haber un gran acuerdo Nacional definir las líneas de trabajo necesarias, proyectando y planificando con políticas públicas de estado, a un horizonte de corto, mediano y largo plazo. Este acuerdo deber ser gestado con bases éticas y morales donde primero esté la Argentina y nosotros el Pueblo.

Hoy con alegría hablamos de hidrógeno verde y de litio como vectores de desarrollo, pero también decimos que no sólo tiene que ser extractivo y de exportación de commodities, sino que debe incorporar valor agregado, aportando a densificar la matriz productiva nacional. Entiendo es buen momento para que nuestros legisladores nacionales trabajen en un proyecto de ley para que las empresas dedicadas a estas actividades y otras vinculadas, reinviertan en el país parte de sus ganancias en ciencia y tecnología aplicada y que permitan el desarrollo de nuestra Patria y la generación de empleos genuinos, en particular impulsando la industria del conocimiento.

Además, no debemos dejar de considerar que la pandemia no ha desaparecido, y lejos de menguar aparecen variantes nuevas permanentemente, como sucede en muchos lugares del mundo donde se ha complicado la situación sanitaria. Tema que debería ocupar a todos para estar preparados para lo que pueda acontecer en el país.

En desafío es grande, apelamos a la responsabilidad de los que hoy toman decisiones para trabajar por el bienestar de nuestro pueblo y la grandeza de nuestra nación.

 

 

*Secretario  General SIPEDYB y Triunviro de la CGT Paraná

 

1/2/2021

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