*Por Juan Manuel Martínez Chas
La Federación Marítima, Portuaria y de la Industria Naval de la República Argentina ha suscripto, con la Administración General de Puertos, una enmienda al original Artículo 19 del pliego de bases y condiciones de la futura concesión del Puerto de Buenos Aires, que no preveía la continuidad laboral de los trabajadores y el resguardo de sus derechos, reformulándolo a partir de la incorporación de la totalidad de los trabajadores representados por los gremios portuarios y con pleno respeto al convenio colectivo e actividad 441/06.
Muchas líneas se han escrito acerca del rol de los gremios y la continuidad de su plan de lucha y de acción, con respecto al Puerto de Buenos Aires, sino también, a la defensa de los derechos de los trabajadores. Durante los últimos años la Federación del sector ha venido advirtiendo acerca de la necesidad de que el Puerto de Buenos Aires, además de dotar de competitividad y previsibilidad a los sectores inversores, como se señala permanentemente desde el gobierno nacional, tiene que afianzar su rol de puerto federal de la Nación con protagonismo de los trabajadores.
Ese protagonismo implica, desde ya, la certeza de la continuidad de sus fuentes de trabajo que se ha logrado el día 27 de diciembre del 2018 y por supuesto, la presencia de los gremios del sector representándolos y tutelando sus intereses y sus derechos. Desde nuestro punto de vista la FeMPINRA ha dado una lección de estrategia, de organización y de lucha.
Debemos recordar que, entre los meses de julio y agosto, del presente año, se enfrentó con fortaleza, quizá ese fue el test definitorio que, de alguna manera, midió el termómetro para esta situación, para lograr que Terminales Río de la Plata se echara atrás con su procedimiento preventivo de crisis, que implicaba casi 200 despidos y que la empresa restante, Maersk o Terminal 4 S.A, desistiera de su condición monopólica.
Son muchos los desafíos que tenemos los trabajadores para el futuro. El primero, como dijo el General Perón en su último discurso en la Confederación General del Trabajo, reforzar nuestras organizaciones. Esto se ha logrado a través de una Federación que a la vez de síntesis es la unidad en la acción para los trabajadores portuarios y la dignificación hecha realidad a través de los convenios colectivos. Por otro lado, merece resaltarse que la continuidad laboral de una concesión, que con su prorroga puede llegar a 35 años, no sólo implica un consenso de largo alcance para nuestro país sino, además, la participación de las organizaciones sindicales en el diseño del país que queremos.
El Puerto de Buenos Aires resulta así una pieza fundamental para cualquier plan económico orientado hacia el desarrollo y que atienda a las economías regionales y al progreso de nuestro país. Del mismo modo, los dirigentes han planteado siempre coherentemente los desafíos de nuestro sector. Incorporando mayores niveles de capacitación, mayores niveles de compromiso y una visión que convierta a la Federación Marítima Portuaria en el acto sindical, sociopolítico, más importante de los últimos años.
Sin duda la importancia y la trascendencia de dirigentes de la talla de Juan Carlos Schmid y otros compañeros de la Comisión Directiva, han dado un rol preponderante a esta visión trascendente del Puerto como un lugar de encuentro de un proyecto de soberanía un proyecto de independencia y un proyecto de soberanía política.
Cabe recordar que el Comercio Exterior de la Nación resulta un elemento vital y potenciador de un país que quiera crecer y que, de alguna manera, recupere valor agregado, flete y desde esa perspectiva lograr una justa distribución del ingreso. Esto tiene que estar insertado, como recientemente lo detallara la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte, en una ley federal del transporte que sea el eje vertebral de integración de todos los transportes del país y reforzamiento de la hidrovia como herramienta central de comercialización entre los países de nuestra región.
Reiteramos la necesidad de volver a discutir y dotar de las herramientas financieras a las truncadas leyes de marina mercante e industria naval que sin duda representarán el reforzamiento del Puerto de Buenos Aires y de los demás puertos del país, de la misma manera que serán una visión de conjunto.
Los gremios demostraron que están a la vanguardia no sólo de la lucha y de la convicción para llevar adelante la dignidad de las familias trabajadoras, sino también desde una visión de país que nos comprende a todos y que orienta la perspectiva hacia una visión federal, de equidad y de justicia social.
*Abogado Laboralista. Docente. Doctor en Derecho del Trabajo (UNTREF). Master en Empleo, Relaciones Laborales y Dialogo Social (UCLM) Asesor Legal de Sindicatos.
