*Por Redacción
Los Sindicatos Aeronáuticos: APTA, APA, UPSA, APLA y UALA, denunciaron que las autoridades de Aerolíneas Argentinas y Austral se niegan a cumplir con el acuerdo salarial del período 2017-2018. Del miso modo la Empresa informó que aún no tiene oferta salarial alguna para la actual negociación y que de hacerlo la voluntad de pago será implementada a partir de los primeros meses del año 2019.
Los gremios adelantaron que frente a la gravedad de la situación se llevarán adelante “todas las denuncias administrativas y judiciales que correspondan. Asimismo, nos vemos obligados a considerar las medidas sindicales que sean necesarias, para dar una justa solución a este conflicto no provocado ni deseado por nosotros”
Las Sindicatos Aeronáuticos indicaron que “en la reunión del día 30 de octubre, la Empresa informó que aún no tiene ninguna oferta salarial para el periodo 2018/2019 y que de hacerlo, la misma recién sería implementada a partir de los primeros meses del año 2019. También imprevistamente comunicó que no iba a cumplir con el Acta Acuerdo Salarial del período anterior. Ese acuerdo, subscripto en octubre de 2017 por 12 meses, estipulaba que si se excedía el porcentaje de aumento acordado, los haberes se ajustarían automática y mensualmente según el índice de inflación del mes anterior”.
“Resta cumplir el pago de octubre de 2018, actualizado según la inflación de septiembre de este año; conforme a lo establecido en esa Acta Acuerdo, aún en vigor para aplicar su “cláusula gatillo”. Fue un pacto firmado por ambas partes con total libertad y, de buena fe por nuestras asociaciones sindicales. Lo pactado obliga (es ley) y debe ser cumplido fielmente por cada sector. Un principio básico del derecho, como de la confianza mutua en que se funda una sociedad y toda empresa”, precisaron las organizaciones gremiales.
Desde los gremios aeronáuticos señalaron que “los funcionarios del Grupo AR, inventaron una disputa en una cuestión negociada y concluida hace un año. Están desviando el eje del debate paritario en curso, al cual además sabotean agregándole una innecesaria conflictividad. Ningún ejecutivo idóneo que persiga el progreso de sus empresas haría eso. Si, una conducción parte de un proyecto político-gubernamental -no empresarial-, que busque confrontar públicamente con los sindicatos porque supuestamente beneficia a ese gobierno, para ganar apoyo social en una campaña electoral Si, una conducción que obra como funcionarios de gobierno -no de las empresas-, y les convenga usar medidas de fuerza que perjudican a decenas de miles de usuarios y los intereses de Aerolíneas Argentinas y Austral, para culpar a los gremialistas de su achique, venta o cierre”.
Los Sindicatos APTA, APA, UPSA, APLA y UALA concluyeron: “El Gobierno Nacional y la conducción de Aerolíneas Argentinas y Austral, han elegido a nuestros sindicatos para demonizarlos y confrontar, ambicionando obtener réditos políticos electorales. Además de querer usarnos como chivos expiatorios, para ocultar una política aerocomercial contraria al trabajo y capital nacionnal y una ominosa administración empresarial”.
