*Por Redacción
El modelo económico de Cambiemos ha perdido la brújula desde un principio. La restauración neoliberal conduce al país a hacia el borde de un abismo profundamente conocido por los trabajadores argentinos. Las operaciones políticas y mediáticas no alcanzan para encubrir las falencias estructurales del régimen.
Durante los últimos días el gobierno se sirvió de los datos del INDEC para construir una trama narrativa donde se pretende mostrar el crecimiento del empleo. Sin embargo y contradicción con el discurso oficial los datos del organismo público no son del todo confiables. Así lo expuso el El Observatorio de Empleo, Producción y Comercio Exterior de la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo.
Según un nuevo informe del ODEP los datos mostrados por el INDEC representan un error de muestra y la baja en la desocupación no es “significativa en términos estadísticos. Al comparar la tasa de desempleo del 2017 con el mismo trimestre del año anterior, se observa que el dato del año pasado (7,6%) está dentro del “intervalo de confianza” “.
El documento, que lleva el título de “Síntomas de Precarización del Mercado Laboral”, da cuenta del crecimiento de la informalidad laboral en un 3,8%. Dicho porcentaje es mayor a la totalidad de empleos registrados en el sector privado que es del 2,2% y al de los asalariados públicos y privados que registró un 1,4 % durante el cuarto trimestre del 2017.
“Hacia adentro del universo de asalariados privados se observa que la creación de empleo está concentrada en sectores con salarios por debajo de la media (construcción, comercio, hotelería y astronomía). En cambio, se destruyen empleos cuyos salarios están por encima de la media: industria y explotación de minas y canteras”, detalló el informe.
En tal sentido se destacó que “el aumento del empleo registrado privado está respaldado por el monotributo (+7,4%) y asalariados de casas particulares (+4,3%). Los asalariados registrados privados son los que menos crecen (+1,3%), por lo que pierden participación en el total, y recién recuperan los niveles de hace dos años”.
Paula Española, coordinadora del ODEP, señaló que “lo importante es analizar no sólo el dato de desocupación, sino la calidad del empleo. La mayor parte de los nuevos puestos de trabajo del cuarto trimestre corresponden al sector informal o a regímenes como el monotributo, lo que es un síntoma de precarización del mercado laboral. Asimismo, hacia dentro del universo de asalariados registrados privados, crecen los empleos en sectores de menores ingresos relativos (construcción, comercio) y se pierden en aquellos de mejores salarios (industria, petróleo).”
Para Nicolás Trotta, rector de la UMET, “las cifras que muestra el ODEP evidencian un claro síntoma de la precarización laboral. El crecimiento del empleo registrado, está impulsado por el aumento en el empleo de menor calidad, por lo que estamos viendo un proceso activo de pérdida en derechos laborales”.
Fuente: UMET.
