Por Redacción
La Comisión Internacional Independiente de Investigación de la ONU sobre los Territorios Palestinos Ocupados, incluida Jerusalén Oriental, presentó en las últimas horas un informe alarmante en el que se acusa a Israel de llevar a cabo una “política concertada para destruir el sistema sanitario de Gaza”. Esta acción forma parte de un ataque más amplio contra la Franja, que incluye “crímenes de guerra y el crimen de lesa humanidad de exterminio”, destacó el documento.
Navi Pillay, presidenta de la Comisión y ex Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, afirmó que “Israel debe poner fin de inmediato a su destrucción gratuita y sin precedentes de instalaciones sanitarias en Gaza”. En el informe, se enfatiza que al atacar las instalaciones sanitarias, no solo dañó la infraestructura médica, sino que también está “atacando el propio derecho a la salud, con importantes efectos perjudiciales a largo plazo para la población civil”.
Se observó que los niños son los más afectados por estos ataques y padecen las consecuencias del colapso del sistema sanitario. El informe detalló cómo las fuerzas de seguridad israelíes han matado, detenido y torturado deliberadamente a personal médico, además de atacar vehículos sanitarios.
Estas acciones se consideran crímenes de guerra, que incluyen “homicidio intencionado y ataque contra objetivos civiles”. La Comisión reveló que el ataque a las instalaciones médicas ha generado un sufrimiento incalculable para los pacientes infantiles, especialmente en áreas críticas como la atención pediátrica y neonatal.
En un caso desgarrador, se investiga el homicidio de Hind Rajab, de cinco años, junto con toda su familia, además del bombardeo de una ambulancia de la Media Luna Roja Palestina que resultó en la muerte de dos paramédicos. La Comisión determinó que la 162 División del Ejército israelí era responsable de estos actos, calificándolos como “homicidio intencionado”.
Asimismo, el informe señaló que la destrucción deliberada de las infraestructuras sanitarias que ofrecen atención en salud sexual y reproductiva representa una violación de los derechos reproductivos de las mujeres y las niñas, además de un crimen de lesa humanidad. Asimismo, se informó que miles de palestinos detenidos en campos militares israelíes fueron objeto de abusos sistemáticos que incluyen violencia sexual y tortura, lo que se traduce en crímenes de guerra y de lesa humanidad.
Pillay destacó que “los terribles abusos cometidos contra detenidos palestinos exigen rendición de cuentas y reparación para las víctimas”. Del mismo modo, denunció que la falta de rendición de cuentas por parte de las autoridades israelíes ha permitido que estos abusos continúen sistemáticamente.
En lo que respecta a los rehenes israelíes y extranjeros retenidos en Gaza por grupos armados palestinos, el informe señaló que muchos de ellos son maltratados para infligirles dolor físico y psicológico. La Comisión instó a los grupos armados a liberar a todos los rehenes y a tratarlos conforme a las normas del derecho internacional humanitario.
La Comisión hizo un llamado al gobierno de Israel para que cese inmediatamente los ataques contra instalaciones médicas, así como la detención arbitraria e ilegal de palestinos. También instó a las autoridades de Palestina a garantizar la protección de todos los rehenes y a investigar las violaciones del derecho internacional. El informe se presentará formalmente en la 79ª sesión de la Asamblea General de la ONU el 30 de octubre de 2024 en Nueva York.
10/10/2024
