Por Redacción
En el marco de su gira por Papúa Nueva Guinea, tras una visita al Gobernador General, Bob Bofeng Dadae, el Papa Francisco se dirigió a la Casa APEC, donde ante una audiencia de más de 300 personas, agradeció la cálida acogida recibida y expresó su admiración por la “extraordinaria riqueza cultural”del país, conformado por cientos de islas y más de 800 lenguas.
“Imagino que esta enorme variedad sea un desafío para el Espíritu Santo, que crea la armonía de las diferencias”, expresó su Santidad. En su discurso, el Papa abordó la diversidad étnica y lingüística, los conflictos tribales y el estatus de la isla de Bougainville, temas centrales en Papúa Nueva Guinea.
Subrayó la necesidad de un desarrollo sostenible, basado en la correcta administración de los recursos naturales. “Estos bienes están destinados por Dios a toda la colectividad”, recordó Francisco e instó a que las multinacionales respeten los derechos de las poblaciones locales al distribuir ingresos y crear empleo.
Asimismo, hizo un llamado especial a los líderes para que asuman la responsabilidad de “dar vida a un desarrollo sostenible y equitativo” y señaló que “la condición necesaria para lograr dichos resultados duraderos es la estabilidad de las instituciones”. Francisco condenó la violencia tribal, que, según él, está exacerbada por la creciente disponibilidad de armas y venganzas. En tal sentido expresó: “Hago votos por el cese de las agresiones tribales, que desgraciadamente causan muchas víctimas”.
Por otro lado, el Papa, se refirió al conflicto en Bougainville, destacó la importancia de alcanzar una “solución definitiva” a la cuestión de su estatus para evitar el resurgimiento de tensiones, especialmente después del referéndum de 2019, en el que se votó a favor de la independencia para 2027.
En un llamado a la fe, Francisco alentó a los cristianos de Papúa Nueva Guinea, que son mayoría en el país, a no reducir su fe a meros ritos, sino a que ésta inspire sus acciones y ayude a la sociedad a superar sus desafíos. Aseguró que “la fe podrá ayudar a la sociedad entera a crecer y encontrar soluciones”.
Por su parte, el Gobernador General Dadae agradeció el compromiso de la Iglesia Católica con la paz, los derechos humanos y el desarrollo en el país, y destacó su lucha contra la violencia y las violaciones de los derechos humanos.Subrayó la urgencia de combatir el cambio climático y advirtió que “la subida del nivel del mar está afectando a los medios de subsistencia de nuestra gente en las islas remotas de Papúa Nueva Guinea y del Pacífico”.
7/9/2024
