Producciones AGN

Cristina Fernández: Alinear pensamiento, palabra y acción

Por Redacción

La ex Presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, emitió este viernes un documento donde analizó la actual situación económica y política que atraviesa el país, con el objetivo de aportar al debate nacional. Al mismo tiempo, aseguró que el peronismo tiene que “enderezar las experiencias y ordenar las nuevas demandas para poder alinear pensamiento, palabra y acción”.

Fernández de Kirchner aseguró que dicha trilogía es “indispensable a la hora de formular propuesta y estrategia que permitan organizar una fuerza política que vuelva a representar mayoritariamente, para pasar de ser oposición a alternativa de gobierno”.

La ex mandataria explicó que el gobierno nacional interviene de manera directa sobre el control de cuatro precios clave para la economía, en contradicción con los postulados anarcocapitalistas de Milei. Sostuvo que esos valores “dirigidos” son: “el precio del dólar, a través de la tablita de crawling-peg del 2 % mensual; el precio del dinero, mediante la fijación de una tasa de interés de referencia ultra negativa; el precio del trabajo, al fijar tope para los acuerdos salariales; solo ha liberado el cuarto precio de la economía: el de los bienes y servicios, aunque con ciertas limitaciones: las tarifas de luz, gas y el transporte todavía conservan exiguos subsidios, en algunos segmentos de usuarios, y el Estado sigue sin contar con datos fehacientes sobre los costos reales de esos sectores”.

Asimismo, puntualizó: “Este escenario, en el marco de una economía bimonetaria como es la argentina, ha llevado a una caída brutal de la actividad económica y ha provocado que nuestro país sea hoy más caro en dólares que los países desarrollados del mundo”. En esta línea, añadió que el actual proceso económico se traduce en una “verdadera tragedia social”.

“Las imágenes de argentinos apaleados y gaseados -en esta oportunidad jubilados- no hacen más que confirmar la violencia que engendran ideologías donde los ciudadanos solo son una variable de ajuste. Todo se ha puesto muy feo. Todo está muy mal”, remarcó Cristina.

Por otro lado, añadió: “Mientras tanto, el gobierno no solo ha abandonado en la práctica el discurso liberal de antiintervencionismo estatal, sino que también ha dejado de lado la teoría monetarista que señala a la emisión monetaria como la única y exclusiva causa de la inflación”.

Fernández de Kirchner destacó que “estas no son las únicas novedades del país en el que suelen morir todas las teorías. Desde hace un tiempo, las calificadoras extranjeras, las agencias vinculadas a las finanzas y hasta algunos economistas vernáculos han comenzado a explicitar públicamente una creciente inquietud acerca de la capacidad de pago de la Argentina respecto de su deuda soberana”.

Insistió en señalar que un factor del problema económico se encuentra en la política bimonetaria: “la utilización de dos monedas, de las cuales la que no emitimos es precisamente la más requerida para atesorar legal o ilegalmente, sustrayéndola del circuito de funcionamiento de la economía y formando activos en el exterior o, en menor medida, guardándolos ‘en el colchón'”.

 

“Esa misma moneda es, además, la única que se puede utilizar para pagar las importaciones que el país necesita para producir, generar riqueza y trabajo bien remunerado. Esta situación permite explicar las dificultades de la macroeconomía argentina, aún en gestiones de gobierno que han llevado a cabo una sustancial reducción de la deuda en dólares, como fue el caso de las desarrolladas en el período 2003-2015”, agregó la ex presidenta.

En tal sentido, indicó que “abordar el problema de la economía bimonetaria y su correlato, la carencia de una moneda fuerte, es lo que debería movilizar a las fuerzas políticas y sociales que siguen creyendo en la Nación. Sin embargo, cuando la antipolítica se quede sin respuestas por el fracaso de teorías extravagantes que solo causan odio y dolor, no solamente deberemos reconstruir la moneda, sino también la política”.

En este marco, Cristina Fernández puntualizó que el “peronismo se torció”, sobre todo “cuando olvidó que los muertos no pagan las deudas y convalidó el préstamo multimillonario e irregular que el FMI, violando su propia normativa interna, había otorgado al gobierno de Mauricio Macri para que ganara las elecciones”.

A esta situación, le añadió que “por primera vez en un gobierno peronista, los trabajadores registrados no llegaron a cubrir la canasta básica total (CBT). O sea: el peronismo con trabajadores registrados pobres, pese a que la tasa de desempleo tuvo un excelente comportamiento, alcanzando el nivel más bajo de las últimas décadas con el 5,7 %”.

Fernández resaltó que el peronismo se desordenó “cuando no advirtió la modificación de las relaciones laborales de la población económicamente activa, donde los trabajadores registrados en la actividad privada no solo son minoría, sino que, además, solo el 40 % de ellos está sindicalizado. Cuando no avanzó sobre el viejo modelo de Estado omnipresente que derivó en ineficiencia e ineficacia y no construyó una nueva estatalidad más vinculada a la comunidad y su organización a través de la participación de sus diferentes estamentos”.

Por último, subrayó que “hay que poder enderezar las experiencias y ordenar las nuevas demandas para poder alinear pensamiento, palabra y acción: una trilogía indispensable a la hora de formular propuesta y estrategia que permitan organizar una fuerza política que vuelva a representar mayoritariamente, para pasar de ser oposición a alternativa de gobierno”.

 

 

 

 

6/9/2024

Subir