Por Redacción
Representantes de la Federación Marítima, Portuaria y de la Industria Naval de la República Argentina, que conduce Juan Carlos Schmid, participaron el último miércoles de la convocatoria realizada por la Comisión de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios de la Cámara de Diputados, donde expusieron las demandas políticas y económicas que hacen a la soberanía nacional en dichos ámbitos estratégicos.
En ese contexto, el Secretario General del Sindicato de Conductores Navales, Mariano Vilar, expuso que es necesario un proyecto de ley “para que sea tratado donde lo considere la Legislatura, tendiente a recuperar las exenciones impositivas parciales de los trabajadores marítimos, previstas en el derogado artículo 26, inciso X de la Ley de Impuesto a las Ganancias. Entendemos que en los proyectos acá tratados está prevista la rebaja del 46% en la incidencia del impuesto, por lo que no debiéramos tener mayores problemas para que vuelva a ser ley”.
Por otro lado, Roberto Milio, Secretario de Interior y Exterior del Sindicato del Personal de Dragado y Balizamiento, señaló que “sin industria naval no hay barcos y sin barcos no hay tripulantes”. Al mismo tiempo, añadió que en este contexto “estamos a merced de las empresas extranjeras en todo concepto. Tanto en la Marina Mercante, por no tener bodega, como por no tener dragas, no tener balizadores”.
Francisco “Pancho” Banegas, Secretario General de ATE Ensenada y referente del Astillero Río Santiago, remarcó: “Nosotros logramos una ley consensuada con los trabajadores de astilleros privados y astilleros públicos pensando en la soberanía nacional”. Asimismo, el dirigente sindical añadió que “lo que buscamos es trabajo, que los barcos se puedan hacer en el país y me parece que es lo mejor que nos puede pasar”.
El Secretario General del Sindicato Argentino de Obreros Navales, Juan Speroni, puntualizó que “entre los astilleros públicos y privados tenemos un colectivo de 10 mil trabajadores. Es indispensable, una obligación que tenemos todos los argentinos y argentinas de mirar nuestros ríos, de mirar nuestro mar y mirar los recursos, no en términos abstractos, sino en términos objetivos, porque son parte de un colectivo que está presente en el proceso de desarrollo y de industrialización en cualquier parte del mundo”.
En otra línea, el vocal titular de la Cámara Naviera Argentina, Alejandro Rapela, contextualizó la capacidad productiva del sector: “Hoy uno ve que la compañía más grande en la Hidrovía (Paraguay-Paraná) que tenía 600 barcas y era argentina, se fue a Paraguay, y nosotros, que somos la empresa más grande del país, tenemos sólo 9 barcas. Hace 40 años había más de 90 barcos argentinos navegando por el mundo. Hoy no hay ni un solo barco argentino en el mundo. Esto habla de la devastación que hay. No creo que la derogación de la ley de cabotaje sea una solución”.
29/8/2024