Por Redacción
Las celebraciones por el Día de la Independencia se enmarcaron en una profunda crisis institucional y un aumento significativo de las tensiones políticas a partir de la amenazas del Presidente Jair Bolsonaro a la Corte Suprema de Justicia, en la figura de Juez Alexandre de Moraes que abrió una causa a “bolsonaristas” por atentar contra la democracia.
“El que actúe fuera de la ley que se encuadre o se prepare para irse“, expresó el mandatario bresileño en un multitudinario acto realizado en la ciudad de Brasilia. “O el jefe de ese poder (la Corte) pone en caja a uno de los jueces de la corte o ese poder puede sufrir aquello que no queremos que ocurra”, insistió el líder reaccionario.
Envalentonado por lo que él mismo consideró una demostración de fuerza, Bolsonaro, afronta por estos días una importante baja en su popularidad. La radicalización de su discurso no hace más que incentivar las reacciones populares en su contra, es por ello que este martes organizaciones políticas, sindicales y sociales, volvieron tomar las calles en 160 ciudades convocados por la Campaña Nacional Fora Bolsonaro.
Durante el acto personal, el Presidente de Brasil afirmó que “no aceptamos medidas o acciones fuera de la Constitución. Tampoco podemos seguir aceptando que una persona específica siga barbarizando a nuestra población. No podemos aceptar más prisiones políticas en nuestro Brasil”.
Como es tradición en el país vecino, este 7 de Septiembre se realizará el Grito de Excluidos, un acto donde las organizaciones de base denuncian los problemas sociales y exigen el cumplimiento de sus demandas para fortalecer los derechos de los más pobres. Bajo la consigna “la vida en primer lugar”, centenares de miles de brasileños y brasileñas ganarán las calles en este Día de la Independencia en defensa de la democracia.