Por Redacción
La perspectiva de un nuevo gobierno abre interrogantes y debates de cara al futuro cercano. Con la expectativas que genera el llamado a la realización de un pacto social, hecho por el ganador de las PASO, Alberto Fernández, distintos dirigentes sindicales ven una oportunidad para adecuar sus convenios colectivos de trabajo sin perder un ápice derechos.
El impacto del uso de nuevas tecnologías, en diversos ámbitos laborales, la transformación de la relaciones entre capital y trabajo y la adecuación sindical a los nuevos tiempos políticos, abre una instancia de debate profundo en la caracterización de los convenios marcos. Sin embargo, esto no implica que las organizaciones gremiales vayan a ceder conquistas sociales.
Si bien algunos gremios hace tiempo que han puesto este tema sobre la mesa, declaraciones de dirigentes como Antonio Caló, Secretario General de la UOM, reavivó el debate. En tal sentido el dirigente metalúrgico expresó: “Dentro de la UOM hemos puesto a los técnicos a trabajar para adaptar las nuevas categorías para los trabajadores que vienen e incorporar a nuevos trabajadores que antes no había”.
“La UOM va a actualizar su convenio de acuerdo a lo que piensa la UOM. Lo que no podemos es negarnos a reformularlo cuando es del 75”, precisó el sindicalista. El avance del desarrollo tecnológico tiene injerencia directa en el ámbito laboral. Fuentes legales, consultadas por AGN Prensa Sindical, señalaron que al corto tiempo existirá una demanda necesaria en materia legislativa para establecer nuevos derechos frente a trabajos que no existían en otra época.
En ese contexto, hay dirigentes sindicales que sostiene que se debe discutir sector por sector una actualización laboral. El abogado laboralista, Hugo Moyano hijo, en declaraciones radiales sostuvo que “Argentina tiene un 40% de trabajo no registrado, evidentemente algún problema hay. Decir que no hay que discutir nada respecto al sistema laboral es una estupidez. No hay que discutir una reforma laboral para perjudicar al trabajador sino una actualización para protegerlo”.
El desafío es importante para el Movimiento Obrero y el debate deber ser profundo y a consciencia. Es importante señalar que en línea con lo que promueve el Papa Francisco, desde la Confederación General del Trabajo, hace tiempo que se debate el uso de tecnología convenientes para el desarrollo sustentable con políticas sociales. De hecho, el Movimiento Obrero argentino hizo un profunda presentación sobre el teme en la Convención de Ginebra de la OIT que se realizó este año. Lo cual quiere decir que el debate está instalado y que no hay márgenes de improvisación.
En un contexto de crisis la discusión sobre futuro del trabajo no es un tema menor, también compromete a empresarios y al nuevo gobierno. Está claro que para la dirigencia sindical no es lo mismo discutir estas adecuaciones en un marco neoliberal que en la perspectiva de un gobierno nacional y popular. Esto recién comienza.
