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Trabajos de cuidado: Un debate necesario

Por Roxana Luque

En la última semana Mujeres Sindicalistas de la Corriente Federal de Trabajadores, Cuidadores de la Casa Común, la Unión del Personal Auxiliar de Casas Particulares  y el Sindicato de Amas de Casa de la República Argentina   formaron una mesa sindical sobre los Trabajos de Cuidado donde emitieron un documento que invita a todas la centrales sindicales a sumarse al trabajo que se desarrolla desde hace tiempo para valorizar lo que aun no se ha puesto en valor.

El documento expresa la necesidad de entender a las Tareas de Cuidado como “una actividad humana fundamental cuyo valor radica precisamente en que es indispensable y constitutiva de la sociedad, que permite el sostenimiento y reproducción de la vida atravesando a todas las personas ya sea de manera directa y/o indirecta”.

Promover la visualización de los cuidados como valor, entendiendo que cuidar es un derecho y también lo es recibir cuidados y que cuando se cuida se debe contar con protección social y derechos como en todo trabajo. También es importante comprender las distintas realidades de los cuidados y de la gestión del hogar. Cabe aclarar que la mayoría de las personas que realizan los trabajos de cuidados son Mujeres.

En este marco, AGN Prensa Sindical dialogó con Beatriz Arguello, Secretaria de Género y Derechos Humanos de la Asociación del Personal de Dirección de Ferrocarriles Argentinos y Puertos, referente de la Red Nacional Intersindical contra la Violencia Laboral y Mujer Sindicalista.

“Las tareas de cuidados se encuentran dentro de las desigualdades de género y se han visto agravadas a raíz de la pandemia, ya que muchísimas mujeres deben realizar el trabajo productivo (trabajo remunerado) mediante el teletrabajo desde su hogares, sumándose el trabajo reproductivo que son las tareas domésticas y de cuidado” explicó la dirigente sindical.

En tal sentido agregó que “todo eso lo hacen en un mismo ámbito, el hogar. Resultando muy difícil compatibilizar los horarios entre el trabajo productivo y el reproductivo, por lo que muchas mujeres en esta pandemia se encuentran desbordadas por la cantidad de trabajo que se le ha sumado” expresó Arguello.

La última encuesta de hogares del Indec, donde se medía el uso del tiempo fue en 2013. Dentro de todos los grupos de mujeres que encuestaron, hay un grupo al que el organismo describe como  inactivas.

Al ser consultada por esta tipificación, Arguello sostuvo que “es reforzar el estereotipo de género, es seguir quitándole el valor al trabajo, de gestión en el hogar y de cuidados, reproductivo. Es invisibilizar a estos grupos de mujeres que nombra como “inactivas”,  en el cual encontramos a casi seis millones de mujeres que realizan nueve horas diarias en tareas de cuidado. Por eso resulta indispensable una política de seguridad social direccionada a las mujeres amas de casa, cuyo reconocimiento estatal al valor de su trabajo sigue pendiente”.

En los últimos tiempos se han producidos avances en materia de igualdad de género, las luchas feministas han puesto de relieve estas realidades que afrontan muchas mujeres, en tal sentido Arguello puntualizó que  “se está viendo,  en las nuevas generaciones,  un cambio socio-cultural. En las nuevas parejas, parejas más jóvenes, se ve que en las tareas de gestión del hogar y de cuidado ya se dividen los roles dentro del hogar”. 

Asimismo sostuvo que “aún falta un montón, por eso es bueno que las mujeres dentro de nuestras Secretarias de Género, desde nuestros sindicatos,  sigamos visibilizando este tema. Para que los compañeros se den cuenta de que deben cooperar en el interior de sus hogares con las mujeres. Porque nosotras también tenemos los mismos derechos que los varones para poder seguir superándonos en nuestros trabajos y, para eso, necesitamos más horas en nuestra tarea productiva”.

Todavía en el siglo XXI no se ha podido lograr el anhelo de Eva Perón,   el del salario por la tarea de cuidar a la familia,  ya que las mujeres como los pueblos y las naciones, si no son económicamente libres nadie les reconoce derechos.

La representante de APDFA  destacó en esa línea que es  “sumamente necesario, porque muchas mujeres amas de casa no se independizan y de repente tienen que compartir sus hogares con un agresor, con parejas violentas, no tienen independencia económica para salir de sus hogares y así terminan muchos femicidios. Creo que con esta política se ayudaría a que haya menos violencia de género”. 

Una frase que siempre se dice es  “eso que llaman Amor, es trabajo no remunerado”, las Mujeres Sindicalistas han querido cambiar esta perspectiva, en tal sentido Arguello concluyó  que “cuando empezamos a trabajar en estos temas, llegamos a la conclusión que las tareas que hacemos en nuestros hogares, las tareas de cuidado hacia nuestros hijos y adultos mayores lo hacemos con amor. Por eso decimos que es amor y trabajo no remunerado”.

 

 

28/9/2020

 

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