Diario de la FeMPINRA

Hidrovía: Cuando el final es el principio ¿se beneficia al país?

Por Redacción

La hidrovía Paraná es un un enclave neurálgico para la elaboración estratégica de políticas de desarrollo para el Comercio Exterior. Como enclave geopolítico es una espacio en disputa donde, da la impresión, el Estado es una actor pasivo, que solo interviene para garantizar la financiación de obras que termina por beneficiar al capital privado.

En los último días el Senador por el Frente de Todos, Jorge Taina, reflotó un Proyecto de Resolución que solicita la construcción del Canal Magdalena. El objetivo del mismo es que se permita el tránsito de buques con una nueva salida directa la mar. Asimismo, se prevé articular la nueva traza en beneficio del Puerto de la Plata.

No obstante para los gremios del sector, tal como pudo averiguar AGN Prensa Sindical, el proyecto impone una serie de interrogantes. En primera instancia es difícil comprender la obra sin la generación de bodega propia. Una de los interrogantes necesarios, que plantean los gremios más representativos del sector, es si en realidad está inversión responde a las necesidades que tiene el país, así como también es necesario saber si el Estado terminará capitalizando la rentabilidad de la misma o la harán los privados que luego trasladan esa capitalización fuera del país.

“La no creación del Canal Magdalena genera una dificultad para toda la Argentina y para buena parte del Mercosur. El Canal Magdalena es un canal que permite un acceso directo del mar a los puertos de Buenos Aires y también permite la salida hacia al mar desde Buenos Aires”, sostuvo el Senador Taina en el programa Puerto Base.

No obstante, en el proyecto de resolución se plasmó  que resulta necesario que “se contemple la necesidad que tiene la República Argentina de contar con un Puerto con 47 pies de calado, que todos los estudios realizados señalan que el indicado es el Puerto de La Plata, con su infraestructura portuaria actual y la necesaria a construir al exterior”. 

Taiana justificó el proyecto, en parte, al argumentar que de esta manera “se ahorraría tiempo. Hoy todo hay que hacerlo por el canal de entrada a Montevideo y genera un retraso porque hay congestión de barcos y esto encarece los costos, los fletes, las estadías, etc.”. 

La mirada sindical promueve cuestionamientos. ¿La Argentina tendrá entonces dos canales, el Canal de Punta Indio y este nuevo? ¿Para qué y a quién beneficia?. Por otro lado, uno de los reclamos puntuales tiene que ver con la falta de participación de los trabajadores en la elaboración de este proyecto.

Fuentes consultadas dan cuenta que uno de los impulsores del proyecto es el ex subsecretario de Puertos y Vías Navegables de la Nación,  Horacio Tettamanti. Para distintos agentes involucrados esto abre nuevas dudas dado que durante su gestión existieron diversos proyectos que terminaron en fracaso. Por entonces, tampoco se hizo caso a lo expuesto por los trabajadores.

Tampoco queda en claro el objetivo de fondo del proyecto, sobre todo en un momento donde no hay un panorama claro de como afectará la pandemia al desarrollo del Comercio Exterior, más aun si se tiene en cuenta la pérdida de volumen en el Puerto de Buenos Aires.

Según datos oficiales por la hidrovía se transporta el 75 % del comercio internacional argentino, allí circulan 125 millones de toneladas de exportaciones agropecuarias, agroindustriales, industriales, mineras, hidrocarburos, porta contenedores, vehículos e ingresa más del 60 % de la importación. Con estos indicadores en la mano  resulta inquietante que se pretenda acelerar un proceso de obra que demanda un gran desembolso de capital,  que aun no se sabe quien invertirá. Sin discusión primaria sobre el manejo del Comercio Exterior, sin una ley de Marina Mercante que permita la recuperación de la soberanía marítima y fluvial de nuestro país, el espacio que se genera es de incertidumbre y dudas.

Consultado por este medio, Roberto Coria, Secretario General del Sindicato de Guincheros y referente de la Federación Marítima, Portuaria y de la Industria Naval Argentina, señaló que por el momento “son proyectos, la verdad, no dejan de ser proyectos. Cuando hablamos del canal Magdalena, donde se debería modificar el trazado con respecto al egreso, cabe decir que esto ya se viene hablando desde de la época de un funcionario marplatense que tiene mucha influencia en un astillero, que prácticamente ha tenido, más de una vez, algún acercamiento al Gobierno de turno para beneficio propio”. 

Al mismo tiempo el dirigente sindical se preguntó  “¿Cuál va hacer el respaldo económico? ¿Cuáles van hacer las inversiones que se van a poder llegar hacer? Si hoy por hoy tuviéramos que ir viendo,  respecto a la hidrovía, el canal de acceso  por lo menos debiéramos mejorar lo que tenemos. La red troncal nuestra está, lamentablemente, bastante abandonada”. 

Coria expresó que se tendría que buscar mayor consenso con los trabajadores en áreas específicas que le den a los proyectos na visión sobre que es  “lo que hace falta y donde ideemos proyectos que no van hacer únicamente este gobierno, que evidentemente tienen que ser proyectos que alcancen a futuros gobiernos. Evidentemente vamos a luchar para que siga siendo dentro de un gobierno de carácter popular como el gobierno que tenemos nosotros. Sinceramente, con todas las urgencias y con todas las necesidades que necesita el canal troncal, es un proyecto más”. 

 

 

04/08/2020

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