Relats Argentina

El Movimiento de Trabajadores en el sindicalismo latinoamericano y argentino

Por Martín Giambroni,  Juan Manuel Martínez Chas y Alvaro Orsatti

En la actualidad, el sindicalismo argentino y los movimientos sociales introducen frecuentemente en sus documentos e intervenciones públicas el concepto de “Movimiento de Trabajadores” . Es el caso de organizaciones miembro de CGT, particularmente la Federación Marítima, Portuaria y de la Industria Naval, Unión Obrera Ladrillera y de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular y en especial, desde su reciente creación, la Unión de Trabajadores de la Economía Popular.

La presencia del concepto de MT se vincula de forma directa con una interpretación que ha hecho el sindicalismo de las recientes perspectivas del Vaticano, en los cuales se formula un llamamiento a que los sindicatos se involucren en la representación y acompañamiento de su “periferia”, los trabajadores excluidos.

Efectivamente, aun cuando los documentos no mencionan de manera explícita al MT, ello sí es practicado en el documento sindical aprobado luego del encuentro entre los Movimientos Sociales y el Sindicalismo de fines del 2017, que ha sido acompañado por la CSI, Confederación Sindical Internacional, presente en esa reunión (lo publicó en su sitio web). Igual estrategia sigue el documento Mesa de Diálogo para el Trabajo y la Vida Digna (Buenos Aires, diciembre 2018), encabezado por varias organizaciones sindicales.

A partir de 1970, la CLAT (Confederación Latinoamericana de Trabajadores), brazo regional de la central socialcristiana CMT (Confederación Mundial de Trabajadores), también    desde    una perspectiva cristiana, incorpora la perspectiva del MT como eje de su propuesta sindical y social. La primera mención al MT parece ser en el documento sobre “Formación Sindical para los Trabajadores”, de 1970, elaborado por el paraguayo Rodolfo Romero, inspirado en antecedentes de la Doctrina Social de la Iglesia, el Concilio Vaticano II y la encíclica Populorum Progressio, que a mediados de los años sesenta, había recogido la figura del “movimiento de trabajadores católicos”, surgida de la práctica de los movimientos especializados de la acción católica (en especial de la JOC) en las décadas del 40 y el 50.

El concepto fue enriqueciéndose y profundizándose en años posteriores, de manera vinculada con el desarrollo de otros: la “Economía Solidaria” y el “Sector de Economía del Trabajo”, en el marco de la creación de la COLACOT (Confederación Latinoamericana de Cooperativas del Trabajo y Mutuales), en 1975. La  “marginalidad económica”, los “trabajadores informales”, y los “trabajadores autónomos”, introducido por el IV Congreso de la CLAT, Mar del Plata, 1987.

De manera vinculada, al año siguiente se creó la COLAPOM (Confederación Latinoamericana de Población en la Marginalidad). Más adelante, la Carta Social Latinoamericana de 1992, incluyó un capítulo específico referido a los derechos de los “trabajadores autónomos de la economía informal”.

En los últimos años de la CLAT, disuelta en 2008 para integrarse en la nueva CSA (Confederación Sindical de Trabajadores/as de las Américas), el concepto Movimiento de Trabajadores tuvo nuevas versiones, tal cual aparece en “Movimiento de los Trabajadores siglo XXI”, 1998 y “Programa de Reivindicaciones” y “Plan de Acción” del XII Congreso, 2004, que son las que se utilizan en esta reseña.

I – Cambios en el mundo del trabajo

El mundo del trabajo está siendo configurado por factores que imponen el individualismo, la insolidaridad y sobre todo la deshumanización.

El escenario laboral está cambiando brusca y rápidamente con:

– La eliminación del fordismo, mediante procesos de flexibilización que adaptan la producción al sistema just in time.

– La creación de un nuevo sistema de empleo de dos niveles, uno de empleados fijos y permanentes a tiempo completo y otro de grupos periféricos, segmentando a los trabajadores.

– Se reduce la plantilla de personal fijo, creando empleos con más precariedad: empleo a plazo fijo, trabajo a tiempo parcial, teletrabajo, subcontratación de una parte de la producción y servicios, incluso por empresas especialmente constituidas para tales propósitos (como las agencias de trabajo temporal).

– Aumento de la jornada laboral y de la complejidad, intensidad y ritmo de trabajo (trabajo a presión), y oficios y profesiones que cambian rápidamente.

– Mecanismos antisindicales como plantas paralelas, plantas globales transnacionales, trabajadores autónomos. El comercio electrónico y las empresas virtuales afectan la sindicalización.

– El concepto mismo de mercado de trabajo está sufriendo un cambio perverso, ya que el trabajo humano es considerado y tratado como una mercancía más.

– Se está abandonando el concepto de sociedad industrial.

II – Fundamentación

Tradicionalmente, el movimiento obrero se organizó, se concentró y trató de hacerse fuerte en los lugares o centros de trabajo. El movimiento sindical sigue limitado a las áreas de los trabajadores de la economía formal y que tienen una relación de dependencia, y aún en estas áreas una parte importante de los trabajadores no están organizados sindicalmente. El movimiento sindical representa el 20% del total de trabajadores.

El sindicalismo del futuro será entonces el que tenga la capacidad de organizar y de representar ese 80% desprotegido. Y esto obliga en la práctica a reinventar el sindicalismo. Es necesario moverse hacia un tipo de movimiento social amplio de todos los trabajadores, uniendo orgánicamente las distintas situaciones, problemas y formas de organización y de acción en un solo movimiento de trabajadores, bajo una clara unidad de conceptos y de objetivos.

Hay que elaborar el pensamiento social del Movimiento de Trabajadores  del siglo XXI, profundizando la concepción de la Democracia Real como Proyecto Histórico Político de toda la sociedad. La definición valórica del trabajo humano que tiene la CLAT conserva toda su vigencia. Por ello no se acepta que se siga hablando del “fin del trabajo”, o de la pérdida de la centralidad del trabajo.

Hay que distinguir entre empleo y trabajo. Hay una crisis del empleo, pero no se puede confundir con la crisis del trabajo y la especulación teórica sobre el fin del trabajo.

III – Definición general, características y objetivos

Es “un movimiento social en que se asume la dinámica sindical en relación a los trabajadores asalariados, aunque trascendiéndola y englobándola hasta integrar todas las situaciones, iniciativas organizadas y categorías de trabajadores que se presentan en la región, aún los desempleados, los más marginados y los más pobres”.

Es el conjunto de formas y expresiones organizativas, de acciones colectivas y solidarias que la clase trabajadora promueve y constituye, en cada etapa de su devenir histórico, para responder a los problemas, necesidades y aspiraciones de todos los trabajadores.

El objetivo es “transformar la pobreza física y moral del trabajo, poniendo el acento fundamental en la persona humana del trabajo. Más en detalle:

– Es la dinámica permanente que impulsa la acción organizada de los trabajadores en función de la liberación humana e integral y por la transformación de la sociedad.

– Emana de la naturaleza misma del trabajador, como persona histórica y sociológicamente encarnado en la sociedad capitalista que subordina la satisfacción de las necesidades humanas y la dignidad del trabajador y del trabajo al poder económico.

– Toma en cuenta los cambios en las relaciones de trabajo, que han superado las concepciones de movimiento obrero y movimiento sindical para asumir la integridad de las condiciones y situaciones en las que se encuentran los trabajadores, independientemente de sus condiciones
actuales y del lugar que ocupan en las estructuras económico-sociales.

– Se impone la tarea histórica de desarrollar la capacidad de inspirar, animar y orientar la dinámica de la acción organizada de los trabajadores para asumir su destino, y como factor de cambio para transformar la sociedad y hacerla plenamente humana, justa y solidaria.

– En la lucha esperanzada por la justicia social el MT adquiere una de sus razones de ser y de existir. Establecer la justicia social exige suprimir toda forma de desigualdad, de explotación, de exclusión social y de violación de los derechos humanos incluidos los laborales y sociales.

– Es un proceso que reconociendo la diversidad y el pluralismo ideológico y orgánico existente se esfuerza por aglutinar en forma solidaria las distintas corrientes y organizaciones que lo componen para lograr objetivos comunes.

– Busca solidarizar orgánicamente los trabajadores organizados en las formas sindicales con los demás organizados en nuevas formas sociales.

La unidad de los sindicatos de asalariados, de las organizaciones sociales de trabajadores no asalariados y las alianzas estratégicas y programáticas con otras fuerzas sociales, políticas culturales y religiosas se torna indispensable ante los actuales cambios en el mundo del trabajo, en las relaciones entre el capital y el trabajo y para la defensa de los derechos e intereses de clase, populares y nacionales.

Pone el acento fundamental en la persona humana del trabajador siguiendo las orientaciones y propuestas de la Encíclica del Trabajo Humano. El objetivo es dar un poder de participación a las grandes masas de América Latina, para que se personalicen y protagonicen. El Movimiento de Trabajadores es, entonces, una nueva concepción de la organización, para interpretar, dar respuesta y encuadrar la nueva realidad y composición de la clase trabajadora.

IV – Democracia y Autonomía

El Movimiento de Trabajadores , histórica y sociológicamente, es un actor y factor decisivo de democratización y es la base indispensable para la democracia económica y social. En consecuencia, las organizaciones de trabajadores deben participar activa ydecisivamente en la construcción de una sociedad democrática.

Abre un proceso de transición que busca nuevas formas de relaciones con la sociedad política, apuntando a un protagonismo sociopolítico por parte de los trabajadores organizados y partir del mundo del trabajo. Las nuevas generaciones de trabajadores son particularmente sensibles con relación a la independencia de sus organizaciones y a la necesidad de una sólida autogestión de las mismas por parte de los trabajadores.

El Movimiento de Trabajadores es un actor y factor decisivo de democratización y es la base indispensable para la democracia económica y social. En consecuencia, las organizaciones de trabajadores deben participar activa y decisivamente en la construcción de una sociedad democrática.

El ejercicio de la democracia en el MT debe ser un ejemplo de participación libre, autónoma e independiente. Las decisiones, gestión y control de las acciones y organizaciones deben ser decididas por el colectivo y a partir de allí autogestionarse. El MT es motor fundamental de la organización social del pueblo, de animar, estructurar y proyectar un efectivo poder social, autónomo e independiente de otros poderes, a partir de nuestra capacidad de respuestas y confrontación y de propuestas y concertación, de organización y movilización para el logro de la liberación personal y colectiva y el desarrollo integral de los pueblos.

El MT debe ser autónomo frente al Estado e Independiente de los gobiernos, de los partidos políticos, de los empleadores, de las iglesias o cualquier otro centro de poder externo a sus afiliados. La autonomía de las organizaciones de trabajadores no es una concesión del Estado o de los gobiernos.

El ejercicio de la democracia en el MT debe ser una escuela de vida opuesta a toda imposición externa, que le permite ser un ejemplo de participación libre, autónoma e independiente. Las decisiones, gestión y control de las acciones y organizaciones deben ser decididas por el colectivo y a partir de allí autogestionarse. Promovemos un profundo cambio popular y social para construir y consolidar la democracia real.

El MT es un derecho de quienes desarrollan mediante su capacidad de libre iniciativa y de efectiva libertad de pensamiento, decisión, acción y organización. La libertad se proyecta en el seno de toda la sociedad, por lo que ésta debe garantizar las condiciones materiales y espirituales que permita a cada persona y al conjunto social, ser dueño de su destino y construir una sociedad democrática de seres humanos libres.

V- Componentes

El Movimiento de Trabajadores se define según tres criterios:

– A partir de su relación de dependencia en las estructuras productivas de bienes y servicios: trabajadores asalariados y autónomos.

– A partir de su ubicación y situación social: jubilados y pensionados, pobladores, marginados, cooperativas y mutuales (ubicadas en el sentido y perspectiva del MT). A los tres primeros se los denomina “sectores sociales” y al último “sector socioeconómico”.

– A partir de situaciones específicas en el interior de los diversos sectores de la clase trabajadora: mujeres, jóvenes, migrantes, discapacitados.

VI – Estrategias Organizativas

Secciones específicas dentro de las confederaciones nacionales. Organizaciones sectoriales regionales que agrupan a los trabajadores según los distintos sectores y/o ramas de actividad económica de producción de bienes y/o servicios, sectores sociales y sectores socioeconómicos. Se refiere a las FSL (federaciones sectoriales latinoamericanas).

La Carta de 1992 llamaba a: “constituir las formas de organización, de representación, de solidaridad y de acción que  convengan mejor con la defensa y promoción de sus derechos y de sus intereses.

VII – Economía y Trabajo Informal

En la Carta de 1992 y el Congreso del 2004 se dedica especial atención a la economía informal y sus trabajadores. La Carta de 1992 planteaba:

– El “derecho a la viabilidad económica, incentivos y facilidades fiscales y crediticias del trabajo autónomo y del trabajo informal, junto con condiciones de trabajo digno, en el marco de eliminar y sustituir las formas y condiciones de trabajo precario y de baja productividad y reforzar el trabajo
realmente productivo.

– El derecho “a la protección jurídica, social, económica y de seguridad social para los trabajadores autónomos y los que laboran en la economía informal”. El documento sobre “Economía Informal en la Acción Profesional” de la XVII Conferencia, se vinculaba a lineamientos de la CMT (Manual “10 Acciones Sindicales para Fortalecer el Estatuto de los Trabajadores de la Economía Informal”).

Las conclusiones del evento se centraron en los siguientes puntos:

– La economía informal está presente en todos los sectores organizados y por organizar del MT.

– Se debe denunciar la criminalización de la protesta social y del trabajo en la economía informal, protestando por el atropello de que son víctimas los vendedores de las calles.

Este trabajo no es un delito, sino que es una actividad laboral originada en un estado de necesidad creado por el sistema imperante, amparado por garantías internacionales del derecho interno de cada país y por los convenios de OIT.

– Las centrales y federaciones sectoriales necesitan incorporar de una manera y efectiva dentro de sus estructuras orgánicas a los trabajadores de la economía informal, mediante la creación de departamentos de atención especializada.

– La OIT debe aprobar un convenio para la protección y el adecentamiento del trabajador no asalariado.

– Es necesario exigir a los gobiernos latinoamericanos la jerarquización de la economía informal al nivel de incorporarla en las constituciones nacionales, y crear direcciones especializadas para la atención de los trabajadores de la economía informal dentro de los Ministerios de Trabajo.

 

 

*Martín Giambroni: Teólogo, profesor en educación de adultos, director del Instituto de Capacitación Julio Gómez Carrillo de la UEJN, Unión de Empleados de Justicia de la Nació. Coordinador de Relats Arentina.

Juan Manuel Martínez Chas: Abogado Laboralista. Docente. Doctor en Derecho del Trabajo (UNTREF). Master en Empleo, Relaciones Laborales y Dialogo Social (UCLM) Asesor Legal de Sindicatos. Coordinador de Relats Arentina.

Alvaro Orsatti: Economista, miembro de la Red Interdisciplinaria OIT-Amércia Latina. Asesor Sindical en Argentina. Coordinador de Relats Argentina.

 

 

17/9/2020

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