Opinión

En el “Fondo”…somos nosotros.

*Por Hugo Godoy

 

 Otra vez el Honorable Congreso de la Nación le vuelve a dar la espalda al soberano y castiga al pueblo argentino. No peco de ingenuo, ni estoy sorprendido… Desde el advenimiento de la democracia he sido testigo de innumerables “maratónicas sesiones” donde se sancionaron leyes contra los intereses de los que menos tienen, de los más humildes.

Sin importar el color político partidario, muchos legisladores terminan convalidando la “entrega”. Ellos que juraron defender la Nación por Dios, por la Patria y hasta por sus hijos. Existió la Banelco, existen los que defienden sus propios intereses y también los de otros.

Lo que me resulta más raro es que siempre escuché de la boca de mi viejo que la democracia era sinónimo de felicidad… Que la mitad de los problemas que teníamos se solucionaban con la democracia,  con el funcionamiento de las instituciones. ¿Saben qué? Mi viejo no sabía que la democracia solo tiene un problema: Algunos de los  hombres de la política sin grandeza, honestidad, humildad ni compromiso. No habrá una verdadera democracia al servicio de la gente con este tipo de hombres.

La grieta, la grieta… de tanto escuchar me convencieron. ¡Si, hay grieta!  Y es cada vez es más grande. La Grieta es la separación que existe entre los políticos y la gente. No importa si son de izquierda, del centro o de derecha. Si son rojos, blancos, negros, puros o impuros.  Muchos, en algún momento,  se olvidan de nosotros, los que los votamos.

El pueblo deposita sus sueños y su esperanza, con la idea de mejorar su vida. Con la promesa de que, en algún momento,  se dé lo que ellos mismos tanto repiten:  “Tenemos un país rico”, “tenemos todo para salir adelante”.

Pienso en el Congreso como una casa macabra, donde habita un “demonio” que termina por poseer a quienes están allí, haciéndoles perder el sentido de la realidad. No es el FMI el único problema, es tan solo una parte. Las malas decisiones políticas aplicadas durante años también generaron la debacle.

Fue vergonzoso el espectáculo montado en el Congreso. Los diputados agrediéndose para las cámaras… no por un país mejor sino para la “gilada”. En el fondo ya sabían que nos iban a cagar, pero tenían que quedar bien posicionados para el año próximo. Porque ¡Hay que renovar las bancas! a como de lugar.  A la gente, al pueblo, al país que dios lo ayude… total ahora Dios también es militante.

Como si no alcanzara con los políticos que tenemos, aparecen algunos dirigentes de las distintas expresiones, con tanta soberbia y mezquindad que se olvidan de lo que dicen representar y tomando actitudes que terminan siendo funcionales al Gobierno.

Distinta sería la realidad si depusieran los intereses personales para marchar todos juntos, y unidos enfrentar un modelo que para nada contiene a la gente y menos garantiza la soberanía de nuestro país. Esta es la simple mirada de un militante, es hora de despertar y por ahí nos demos cuenta que solo nosotros somos capaces de cambiar la historia…

Porque en el fondo… Somos nosotros.

*Secretario Gremial del Sindicato del Personal de Dragado y Balizamiento.

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